VIII

La relación del pensamiento y la visión son correlativas a un ciberoperador rhopográfico, pensador y visor incansable que no tiene historia, vive en el silencio y carece de biografía. El blog siempre se concibe como una extensión de la biografía, narración más o menos afortunada de la vida de una persona, recopilación exhaustiva de escenas y hechos memorables, siempre bajo la sospecha de megalografía; mientras que la relación adopta las características de una rhopografía, no recoge los datos relevantes y los hechos significativos de una vida, sino la ausencia de datos, las insignificancias y las no-significancias, la larga serie de contingencias y singularidades de una vida no personal que bulle en cabezas innumerables. De la sujeción objetiva y subjetiva del blog, se pasa, de un lado a otro del espejo, a la operación ingobernable de la RHOPOGRAFÍA como una PURA RELACIÓN de NO(WE)B LOG(OS).

VII

Detrás de un BLOG hay una persona; detrás de una RELACIÓN no hay nadie, esto es, una cabeza múltiple, una multitud de cabezas silenciosas fuera de la historia, sin nada que decir. El registro cronológico, ligado a la historia y a un log(os) inherente de sucesión y conexión (log in/ log out) es falso y falsea al pensamiento y al pensador. La identidad no es una ventaja, sino un impedimento real para el surgimiento de la idea, que no oscila entre la conexión y la desconexión relativas, el encendido y el apagado, a modo de conmutador, sino que tiene su medio ideal en el cortocircuito, la interferencia, la iluminaria del arco voltaico. La génesis de los blogs pertenece al orden de la impostura, una representación de un tiempo concreto, dispar, dotado de infinidad de líneas simultáneas, que se transforma en un tiempo evolutivo y acumulativo, un proyecto de un sujeto, historia personal visualizada en la marea negra de la historia. Pensar no es nada personal, ni tiene nada de lógico; no hay razón aparente ni sucesión que hilvane el discurso. Un pensador no es (una) persona jurídica ni física, es el operador, el signo crepuscular ligado a la operación del pensamiento.

VI

La astucia de la razón, siempre atenta a la renovación de las formas, se supera a sí misma, alcanza su para sí, en el blog como síntesis personalizada de la red (web) y el logos (log), alianza del registro, la sucesión, el orden jerárquico, la razón, el entrecruzamiento, la conexión y los árboles lógicos. Todo blog, como diario personal en la red, es un registro cronológico de un SUJETO, en cuanto hablante y dotado de palabra, según la ley de la sucesión. Personalidad que se explica, justifica y funda en el mismo momento en que (se) registra, expone al colectivo potencial o real de lectores; explicación personal de un sucesor unitario e idéntico, por disgregado que esté, como punto de origen, referencia ineludible de un cúmulo de sucesos y eventualidades que da razón, responde por lo que notifica. Es lo que dice (que es): un YO. Aunque sea ficticio no importa, siempre se trata de reconstruir una personalidad, de unificar los puntos de vista, acumular semejanzas, similitudes y ocurrencias para crear un PERFIL reconocible, un sujeto de reconocimiento para sí mismo y los otros. Crónica de sucesos a pequeña escala, tribunal de la razón doméstico y digital, alianza imperecedera de razón, palabra e historia.

V

De la construcción de las vías romanas a la invención del alcantarillado, de los sistemas de alumbrado a gas a las redes eléctricas de iluminación y conexión, del telégrafo y el teléfono a la televisión hasta llegar a las redes telemáticas y digitales, los sistemas electrónicos digitales de transmisión de datos e información y la lógica digital microprogramable, todo confluye al mismo fin de encarnar el LOGOS en el corazón del mundo y elevar la abstracción y la distracción a la máxima potencia posible. La RED no es más que la consecuencia de este impulso, la proyección de un código binario, la EXPRESIÓN de un LENGUAJE universal de mediación, superior al de la mera técnica, red lógica o lógica ramificada electrónica, proceso continuo de transformación de todas las relaciones en representaciones de relación.  El edificio que construye la razón programada y programable, discurso material enclavado en las cosas, implica la destrucción hasta los cimientos de la realidad psíquica y física, humana y no humana, la demolición de lo REAL y la aniquilación de la VIDA. Maniobra de distracción a escala planetaria que por primera vez en la historia ofrece la posibilidad a cualquiera, sujeto a unas categorías y etiquetas específicas, de ver y decir cualquier cosa, vehículo universal de obsesiones, delirios y opiniones, siempre y cuando el tiempo empleado no guarde proporción con las consecuencias reales, si las hay, que se deriven. Una nueva versión de cambiarlo todo para no cambiar nada, juego de manos que por un lado permite sin restricción, apología del libre acceso, y, por otro, excluye de todo control efectivo del rumbo de los acontecimientos. TODO, en teoría; NADA, en concreto. Mientras que la maquinaria puesta en marcha sí que actúa en el mundo, y de qué manera, a un ritmo frenético de borrar del mapa el más mínimo rastro de vida autónoma, natural e ilógica. La falta de conocimientos del nuevo lenguaje, la inadecuación del mundo de los hombres y del mundo natural a la nueva PALABRA revelada, se considera motivo de sospecha suficiente para cursar una orden de eliminación.

IV

La materia propia del ciberoperador rhopográfico no son las páginas ni los enlaces, el hardware o el software, los circuitos, datos o programas, sino la masa plástica del PENSAMIENTO, en estado crítico, y la desvinculación generalizada. Las operaciones internas y externas sólo se distinguen desde un punto de vista arbitrario; en realidad, se trata de una misma RELACIÓN pensante y vidente, ubicua e ilocalizable, obra total que invalida el criterio de pertenencia, adecuación y propiedad. La información y el exceso de conocimientos son una forma peculiar, pasiva, de asfixia y parálisis; la sociedad del conocimiento es la punta visible del lazo corredizo de la red, el juego del ahorcado elevado a entretenimiento universal. Un pensador anodal, desenlazado y desvinculado aumentará el grado de desconocimiento, la proliferación de enigmas, extenderá velos y profundizará la sima de lo desconocido hasta donde lleguen sus fuerzas. Luego morirá. La velocidad de la mano que clicka el ratón, por mucho que acelere, es incomparable con la celeridad infinita del pensamiento. La cabeza anónima gana la partida, en otro lado, bajo otras reglas, a la síntesis del órgano y el mecanismo.

III

Un ciberoperador rhopográfico es por necesidad múltiple y contrario a los operadores lógicos unitarios, inclusión, negación y exclusión, que guían los motores de búsqueda. Explorador no jerárquico ni jerarquizante, la valencia elevada de insignificancia y no-significancia opera una suspensión temporal de los algoritmos que valoran la importancia de los contenidos de la red, proceso automático de asignación, mediante números, de la relevancia de las páginas indexadas. Sin tener que recurrir a ecuaciones con millones de variables y términos, pone en cuestión el sentido de la distribución, el orden jerárquico y la escala de posicionamiento. Cada desplazamiento, cada operación, no se atiene a límites preestablecidos, no reconoce géneros, esferas temáticas, grupos de opinión ni dominios. Nada le es ajeno; todo le atañe sin vínculo aparente. La finalidad última no es traspasar el pensamiento a la red, sino traspasar la red con el pensamiento, ocupar los intervalos, el eslabón débil de la cadena para desanudar los nodos de identidad y los módulos de semejanza. La búsqueda del intersticio en lugar de la búsqueda de la información tiene por único algoritmo válido el inconsciente.